22 de julio de 2012

01. "No espero que volvamos a encontrarnos."






Una chica caminaba, sola, bajo el plomizo cielo londinense. Llevaba varios libros apoyados sobre un brazo, y hojeaba uno con la mano que le quedaba libre. En su móvil, a través de los auriculares que llevaba en los oídos, sonaba su canción favorita, aquella que tanto le ayudaba a relajarse. Una brisa fría le agitó el largo cabello pelirrojo, y ella se lo recolocó, molesta, bajo su gorro de punto marrón.
Iba absorta en las palabras que leía. Había recorrido aquellas calles una infinidad de veces, así que no le resultaba difícil ir caminando sin mirar por dónde pisaba.
Al doblar una esquina, chocó de frente con alguien, y todos los libros que llevaba se cayeron al suelo, peligrosamente cerca de un charco que había formado el agua de la lluvia.
-Vaya, fantástico.
Se arrancó bruscamente los auriculares de los oídos, y se agachó, sin dirigirle una mirada al desconocido con el que había chocado. Empezó a recoger sus libros con cuidado, asegurándose de que no se habían mojado, cuando notó cómo el desconocido también se agachaba.
-Lo siento- dijo. Ella se sorprendió al oír su voz. Era una voz bastante grave, pero de un chico joven. Era una voz que le sonaba muchísimo. Pero no sabía de qué. Recogió el último libro, pero su mano se topó con la del chico. Eran unas manos grandes y fuertes, con la piel tersa y suave. Muy suave.
Entonces, ella lo miró.
Unos ojos verdes la miraban, curiosos, bajo unas pestañas densas y oscuras. Unos preciosos rizos castaños enmarcaban dulcemente su rostro, y su sonrisa torcida marcaba unos perfectos hoyuelos.
Era aún más guapo en persona.
Lo conocía, claro que lo conocía. Todo el mundo lo conocía, a él y a los otros cuatro. Por algo sus canciones estaban siendo número uno en muchos países. Y ella, las escuchaba a todas horas. Lo único que hizo fue enarcar una ceja por la sorpresa. No iba a gritar, no iba a saltar, no iba a llorar. No le iban esas cosas. Amaba sus canciones y sus voces, y quería que siguieran cantando durante mucho más tiempo, pero eso era todo. Nunca había soñado con conocerlos. No quería. No quería que estuviesen aún más presentes en su vida. Ya bastante era que sus melodías estuviesen a todas horas en su cabeza.
Simplemente, le encantaban, pero no quería conocerlos.
Por su parte, él no despegaba la mirada de ella. Se preguntaba continuamente si era una fan, y si no lo era, cómo debía reaccionar. "Soy un chico normal, soy un chico normal", se recordó. Le tendió la mano.
-Harry Styles, encantado.
Ella miró su mano, ligeramente divertida.
-Ya- contestó. Harry bajó lentamente su mano, sin saber qué hacer. Y eso era insólito, porque siempre sabía qué hacer. Sobre todo cuando se trataba de una chica. Se rascó levemente la nuca, desconcertado
-Bueno, creo que debería irme- dijo ella. Empezó a alejarse, como si nada. Como si nunca se hubiera chocado con uno de los chicos más famosos del Reino Unido.
-¿No me vas a decir ni tu nombre?- preguntó él, casi alzando la voz para que ella lo oyera. Ella giró la cabeza, haciendo que algunos de sus bucles rebotaran en su espalda.
-No- dijo, y siguió caminando. Unos segundos después se detuvo, y se dio la vuelta completamente.- Sinceramente, no espero que volvamos a encontrarnos.
Y se fue, sin volverse ni una sola vez más. Harry dio una vuelta sobre sí mismo, completamente abrumado. Era una simple chica, una de tantas, una más entre las miles que había conocido. Entonces, ¿por qué le producía tanta curiosidad? Por lo poco que se habían dicho, ella parecía tener bastante carácter. Y las chicas con carácter no solían encajar con los chicos como él. Principalmente, porque les veían las intenciones a un kilómetro. Él era Harry Styles, rollos de una noche. El que se acostaba con las chicas sin acordarse de sus nombres. El que nunca llamaba, el que nunca volvía. A él le iban las rubias con un cuerpo de infarto, no chicas pelirrojas metidas en sus libros. Pero entonces, ¿por qué coño sentía una y otra vez cómo los ojos azules de aquella chica lo traspasaban? ¿Por qué?
No tenía ni puta idea.
Y estaba empezando a agobiarse.
Miró alrededor, y vio un pequeño objeto negro en el suelo, a escasos centímetros de él. Era un Samsung, de los últimos que habían salido, muy bueno. Tocó la pantalla y lo desbloqueó; por suerte no tenía contraseña. En el fondo de pantalla, una chica rubia abrazaba a una pelirroja, sonriente. Era ella.
-Bien- susurró.
Miró la lista de llamadas recientes. El número que más se repetía era el de una tal Liss. Supuso que sería la rubia que salía en la foto. Sin vacilar, pulsó el botón de llamada.
-Dime, Alex- ¿"Alex"? Entonces, ¿su pelirroja se llamaba así?
-No soy Alex. Soy un amigo suyo- dijo, sin pensar. Siempre había mentido muy bien.- Es que hace un momento me he encontrado con Alex por la calle, y se le ha caído el móvil. Me gustaría devolvérselo.
-Ah, está bien. ¿Tienes nuestra dirección?- ¿"Nuestra"? Entonces, ¿vivían juntas? Ciertos pensamientos pervertidos empezaron a vagar por la mente de Harry. Sacudió la cabeza para intentar alejarlos.
-Eh, no. Me la dio un día, pero no la recuerdo- dijo, riendo ligeramente.
Liss le dio la dirección, y se despidieron. Ya sabía el nombre y la dirección de su pelirroja. Y también tenía su móvil. Además, si no tenía suerte con ella, podía intentarlo con la rubia, que parecía más ingenua. Sí, había tenido suerte. Por curiosidad, volvió a desbloquear el móvil, y entró en la carpeta de música. Miró las listas de reproducción. Simple Plan, Avril Lavigne, McFly, Ed SheeranParachute... y allí estaban. One Direction. Todas, absolutamente todas sus canciones, desde las de X Factor hasta las que no venían incluidas en el último disco. Entonces, era una fan, una directioner. Pero, ¿por qué esa reacción? Ni saltos, ni gritos, ni ojos brillantes, nada. Simplemente indiferencia.
Se recordó que ya tendría tiempo de averiguarlo. Porque iba a volver a verla.

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Y, aquí tenéis. El primer capítulo. No me ha costado mucho, porque ya tenía bastantes cosas escritas en mi cuaderno, pero he cambiado totalmente el carácter de Harry. Al principio, lo tenía en mi cabeza como un chico tierno, dulce y romántico, pero he preferido hacerlo así. Es un imbécil pervertido que solo ve a las mujeres como un objeto sexual. Además, aunque ahora Liss parezca un personaje bastante secundario, va a tener bastante protagonismo. Espero que os guste :3
Posiblemente, y si el ordenador me funciona adecuadamente, subiré el siguiente dentro de un rato, porque hoy estoy bastante bien de inspiración. Y ya acabo, eh.
Os quiero. 
PD: No os olvidéis de comentar.
PD2: Os permito morir con la foto que he puesto. Yo lo hice, pero tuve que resucitar para escribiros el capítulo. PERO RECORDAD QUE HARRY ES MÍO. ¿Vale? Vale.

5 comentarios:

Laura. dijo...

Buenas(: Yo no soy Directioner, pero no importa porque esta historia sé que me va a encantar, y las canciones quieras o no son bonitas aunque no sea una gran seguidora. Pero bueno, dentro de todo esto voy a comentarte lo que de verdad creo que es importante; el capítulo, y es que es perfecto, porque dentro de esa típica escena de los libros le has dado ese cambio tan peculiar de la indiferencia de la chica, y es algo que ninguna de las que leamos esto se lo habrían imaginado, y eso es genial.
Yo también me imagino a este chico dulce y romántico por eso me ha sorprendido el cambio, pero también me gusta, porque este chico va a prometer, tal vez un supuesta infidelidad, un enamoramiento radical, no lo sé pero como ya he dicho fijo que me va a encantar al igual que este capítulo.
Siento la chapa, pero dudo en que sea la última :( es que no se escribir comentarios cortos, soy un caso aparte...
Un beso preciosa, me encanta que hayas vuelto, y tan fuerte de verdad(:

epifonema dijo...

JKAJKJKAJKL *-*
Yo tampoco soy directioner, pero tengo que reconocer que este capítulo es increíble. Y las canciones de arriba, si tuviera que elegir una, creo que me quedaría con todas, porque todas son preciosas.
Me ha encantado, en serio. La forma en la que escribes, el chico que parece muy dulce y en el fondo no lo es, y Alex, sí así se llama, y su indiferencia.
Y tengo curiosidad de que va hacer Liss en todo esto :')
Un besito y espero pronto el próximo ^^ :'D

epifonema dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Araceli∞ dijo...

Bueno, pues yo si que soy directioner y tengo que decir que este capitulo, es precioso. Yo al principio pensaba que Alex iba a reaccionar como una fan, me refiero a lloros, gritos etc...
Pero no, y eso me ha encantado y lo de Harry me a sorprendido y sinceramente me ha gustado, no es como las típicas historias un chico romántico y dulce, y bueno de Liss, no puedo decir nada :)
Jajaja Besazos y siguela, muy bonita!

Nadia. dijo...

:O amo a este Harry hahahaha. Y Alex? Porqué no ha reaccionado? Si es Directioner le debe gustar Harry, no? Amo a tu Harry, en serio hahaha. Bueno, pástate por mi blog, también es una historia, y acabo de empezar:) UN BESO! http://heavensinyoureyes.blogspot.com.es/